Esas lecturas las debe realizar alguién que tenga la experiencia y que pueda lidiar con lo que surja durante la lectura.
Muchas veces se descubren eventos que pueden provocar reacciones o crisis, y no todos los tarotistas pueden, quieren, o están preparados para lidiar con eso. No hay duda de que en nuestro ser se encuentra todo el "software" o programación de lo que fuimos, lo que somos, y lo que podemos llegar a ser.
El tarotista debe ser muy responsable al interpretar eventos traúmaticos o dolorosos utilizando las cartas.
Especialmente eventos que no están a tono con los valores del consultante en la vida actual...por ejemplo, decirle que en otra vida fue un asesino, o que murió ahorcado.
Es importantísimo que el tarotista siempre esté capacitandose en otras disciplinas que apoyen la sanación.
Debe diversificarse, asi poseerá más opciones para ofrecer a sus clientes.
También es importante que conozca sus límites como sanador.
Se puede sugerir al consultante, de manera compasiva, la visita a un profesional de la salud si asi se cree conveniente.
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